19 de enero de 2016

Temporada Invierno 2016


Aunque mi vida laboral absorbe ya la mayor parte de mi tiempo, aún encuentro momentos (como mi kilométrico recorrido en transporte público) para darle prioridad a las cosas de la vida que realmente me importan.
COMO VER ANIME, POR EJEMPLO.
Hoy, a falta de un mejor tema qué cubrir, les traigo mis descubrimientos para la temporada de anime que acaba de abrir hace poco más de dos semanas. Las dos siguientes son, (en mi humilde y no completamente errada opinión) las mejores propuestas de esta temporada.




BOKU DAKE GA INAI MACHI.

Satoru es un dibujante de manga al cual rechazan repetidas veces de una editorial, porque sus historias no transmiten nada de su personalidad. Satoru comienza a preguntarse por qué no es capaz de dejar que nadie vea su verdadero yo, y durante esta introspección conocemos su rutina diaria trabajando en una pizzería.
Un día, mientras reparte pizza, Satoru experimenta un extraño fenómeno que se ha repetido a lo largo de su vida, al que él llama "Revival": vuelve a vivir los 5 minutos anteriores a que alguna vida corra peligro de terminar. En esta ocasion, logra salvar a un pequeño de ser atropellado por un camión, con consecuencias bastante malas para él. A lo largo de todo el episodio, y con ayuda de su madre, va recordando puntos clave de un suceso importante de su vida, que probablemente contengan la respuesta de un crimen cometido 20 años atrás.

NO LE DIGAN A NADIE QUE LO CONSIGUIERON AQUÍ.



AJIN.
17 años atrás, se descubrió el misterio de una nueva raza: los "ajin" son criaturas inmortales con apariencia humana. Su presencia ha desencadenado batallas y un despliegue de seguridad ultra secreto ha sido puesto en marcha para preservar la superioridad de la raza humana.
Kei es un chico de preparatoria al que realmente no le interesa gran cosa aparte de estudiar y ser un buen ser humano. Casi ha olvidado el extraño incidente que su hermana y él presenciaron años atrás, y también casi ha logrado evitar que lo relacionen con su mejor amigo de la infancia. Sus compañeros de clase se muestran muy entusiasmados por cobrar la recompensa que ofrecen por entregar a un ajin, pero el principal problema es que uno no puede probar que otra persona lo sea, a menos que no pueda morir.
El hecho de que este anime esté generado completamente a computadora es otra de las cosas en sumo interesantes del mismo. Puede que este estilo de animación no termine por acomodarnos a todos, pero hemos visto fusiones interesantes como en el caso de Owari no Seraph, así que hay que saber pasar por alto los detalles que nos incomodan y disfrutar de una historia que, bien llevada, tal vez se convierta en uno de los más famosos animes de este año.

POR FAVOR NO DESCARGUES NADA DE ESTE ENLACE.

¡Ojalá los disfruten!

6 de enero de 2016

Perorata

No soy la única persona en este planeta.
De hecho somos varios.
La coincidencia viene en estar de acuerdo en estar en desacuerdo que el resto, usen su celular al momento que ingieren sus alimentos.
 

En los últimos meses, ha habido un creciente déficit alimentario en el que se ha manifestado que llegan pedazos de sus smartphones a sus estómagos.
Esto ha hecho evidente, que las modificaciones puedan estar sucediendo en el cuerpo humano.
 

Hemos visto cómo la frialdad se ha apoderado en una gran cantidad de gente. Sucesos como matanzas de algún ser vivo han pasado a ser parte de la cotidianidad.
O también por ejemplo, cómo un vegano, entre otros, no siente emoción alguna al comerse una de las plantas en su vida diaria.
 

Las relaciones que tenemos con nuestras mascotas o en su bien, en su estatus como hermanos o gran parte de nuestra familia que son, se han ido degradando. Denostamos estar dejando de ser primitivos para ser neo-primitivos.

Que las cosas básicas al desatenderlas las estamos fusionando con cosas que ahora permitimos se apropien de nuestra vida misma.


La ingesta de productos que no fueron hechos para ser comidos, lo estamos realizando y no sabemos hasta qué punto podamos convertirnos en algo que tal vez nunca llegamos a considerar.


Por otro lado, los microbios que estamos generando al acumular de otras actividades que antes no sucedían, nos están permeando.


La globalización que con tanta alarma se mencionó en la década de los noventa, ni siquiera ya ha tenido lugar a una discusión creativa, puesto que ya ha sido solidificada.


Seguiremos creciendo pero ya no de una forma única. Sino con rasgos desconocidos que posiblemente ni después de la vida, sabremos deducir.


Elijamos una vida difícil.

Si las generaciones anteriores pudieron lograrlo, nosotros también podremos hacerlo.
Sólo mirémonos a nosotros mismos, antes de que sea demasiado tarde.

 
biz.